

La ambientación del juego se desarrolla en tiempos de guerra entre Dragones y Matadragones, donde tú serás un aprendiz de matadragones. Empezarás en un pequeño pueblo donde te entrenarás y elegirás la especialidad que mas te guste, ya sea arquero, caballero, sacerdote o mago, cada uno con sus características especiales y habilidades. Estamos en un mundo llamado Rivellon que pronto se verá dividido, los caballeros del Dragón pronto se unirán al malvado Damian para liberar y someter a todos sus demonios, y así controlar el mundo. Y como no podría ser de otro modo nuestro héroe será el elegido para salvarlos a todos. Hemos empezado diciendo que somos un Matadragones, pero los acontecimientos del juego en su historia, nos llevan a cambiar de bando, convirtiéndonos en un Dragón guiado por los consejos de otros protagonistas del juego.
A parte de la misión principal, tendremos muchas otras secundarias donde conoceremos otras interesantes historias que nos llevaran a conocer más profundamente este mundo, haciéndolo un juego más largo y con más alicientes. Hay numerosos sitios que explorar, zonas secretas, cuevas y tesoros escondidos. Podremos elegir si hacer o no algunas misiones secundarias sin que ello afecte al desarrollo del juego. Hay muchos tipos de enemigos, aparte de los humanos con o sin poderes, hay esqueletos, trols, goblins, fantasmas, magos, en fin de todo.
En Rivellon abunda la Magia, por lo que tendremos un gran abanico de poderes especiales y habilidades que iremos subiendo de nivel a medida que ganamos experiencia al ganar batallas o cumplir misiones, además de comprar armas y armaduras con el oro que encontremos. El modo de juego es en tercera persona y lo moveremos con el clásico "WASD" y golpeando con la espada con el ratón y saltar con la barra espaciadora, nada complicado. Todo el camino iremos a pie, pero hay unas criptas repartidas por el mundo para teletransportarnos de forma rápida de un sitio a otro. Uno de los puntos importantes del juego, será cuando adquiramos la torre de batalla después de derrotar a un poderoso enemigo, que será nuestro centro de operaciones y nuestro hogar, donde tenemos ha varios hombres dispuestos a ayudarnos en nuestra misión. Una de las habilidades mas significativas de nuestro personaje, es la de leer las mentes, que nos ayudará en mas de una ocasión y causando diferentes reacciones en las personas. En las batallas tendremos que intercambiar entre espada, magia y pociones para sobrevivir y ganar no siendo excesivamente difícil. Sin duda el punto fuerte del juego es cuando consigues convertirte en Dragón y puedes surcar los cielos lanzando fuego y algunas habilidades especiales, pero cuidado porque hay zonas antidragon bien preparadas.
Respecto al nivel gráfico, Divinity II cumple sin ser algo sobresaliente, un modelado normalito y texturas bien desarrolladas, la ambientación esta muy cuidada pero en algunos casos, como cuevas o interiores se repite un poco. Durante el juego nos acompaña una banda sonora de canciones épicas, de aventuras que harán del juego más llevadero.
En definitiva, Divinity II: Ego Draconis es un juego de Rol divertido, con aires clásicos y con una historia que engancha, te lo podrás pasar en unas 25 o 30 horas.
Imagen: Captura