

Shigeru Miyamoto, en el E3 de 2006
Miyamoto es sinónimo de magia, o al menos eso es lo que dicen que imprime a todos los juegos que pasan por sus manos. Este artista y diseñador de videojuegos japonés ha participado en el desarrollo de más de setenta títulos bajo el sello de Nintendo, creando algunos de los personajes más carismáticos y populares de la industria, como Mario, Link o Donkey Kong. No es de extrañar, por tanto, que a Shigeru se le considere el mayor genio de la historia de los videojuegos. Nacido en Kyoto hace 55 años, Miyamoto fue desde pequeño un gran aficionado al dibujo y la pintura. Al cumplir dieciocho años decidió cursar sus estudios en la Academia de Artes Industriales y Manuales, donde se graduó en 1975. Tan sólo dos años más tarde, en 1977, consiguió gracias a su padre una entrevista con Hiroshi Yamauchi, presidente de la por aquel entonces compañía de juguetes Nintendo. Miyamoto fue contratado, aunque su primer contacto con los videojuegos no se produciría hasta 1980. Es en ese año cuando Yamauchi le encarga la tarea de mejorar el juego de recreativa Radar Scope, al no tener éste el éxito deseado. En lugar de eso, Miyamoto decidió crear un nuevo título desde cero, y el resultado no sería otro que Donkey Kong, uno de los primeros juegos de plataformas de la historia. Además, en él aparecía por primera vez el que a la larga sería el mayor símbolo de la compañía, y del mundo de los videojuegos en general: Mario. La recreativa fue todo un éxito, que ayudó a la compañía nipona a introducirse en el mercado norteamericano. De ese modo comenzó la meteórica carrera de Miyamoto como productor estrella de Nintendo, hasta el punto de que en 1983 se puso a su disposición una rama entera de la compañía. Ese mismo año el genio japonés creaba otro de los grandes clásicos de los videojuegos: Super Mario Bros, el juego más vendido de toda la historia.https://www.youtube.com/watch?v=NPjsBsz4trk
Super Marios Bros, juego de Miyamoto para la NES Pero la de Mario no es, ni mucho menos, la única saga creada por Miyamoto. En 1986 lanzaba al mercado The Legend of Zelda, título de aventuras que nos presentaba por primera vez a Link, un intrépido joven que ha de salvar a la princesa Zelda atravesando el mundo de Hyrule. El éxito de éstos títulos le permitió desarrollar numerosas continuaciones, en las que se mantenía intacta la calidad y originalidad que siempre ha caracterizado a su obra. Otro momento clave de su carrera fue el lanzamiento, en 1990, de la consola Super Nintendo, en cuyo proceso de creación participó activamente. Bajo esta plataforma Miyamoto realizó algunas de sus mayores obras maestras, como F-Zero, Super Mario World, Super Mario Kart o Star Fox. La siguiente gran apuesta de la compañía japonesa, Nintendo 64, permitió a Miyamoto ir más allá en el desarrollo de sus juegos. Comenzando por uno de sus juegos de lanzamiento, Mario 64, que supuso toda una revolución para el mundo de los videojuegos, redefiniendo no sólo el género de las plataformas sino el mismo concepto de juego en tres dimensiones. Esta nueva consola también permitió actualizar muchos de sus títulos anteriores, con juegos como Mario Kart 64, Star Fox 64 ó The Legend of Zelda: Ocarine of Time. Mención especial merece éste último, que para muchos constituye el mejor videojuego de la historia. Es curioso que, de los diez primeros puestos de dicha lista, cinco de ellos estén ocupados por juegos en que Miyamoto participó. Con la llegada de la siguiente gran consola de Nintendo, Gamecube, Miyamoto continuó renovando sus grandes éxitos del pasado (Super Mario Sunshine, Metroid, The Legend of Zelda: The Wind Waker), con espléndidos resultados. Pero también hubo tiempo para la originalidad: juegos tan innovadores como Pikmin, o el cambio radical de imagen que supuso la aplicación de la técnica Cell Shading al último episodio de la saga Zelda son tan sólo algunos ejemplos de ello. Respecto al futuro, Shigeru Miyamoto se encuentra embarcado en varios proyectos para Nintendo Wii, con la que se muestra «muy esperanzado» gracias a las nuevas posibilidades que su sistema de juego puede proporcionar. Entre ellos se esperan con especial interés las próximas entregas de sus sagas estrella que, como sus predecesoras, parecen estar destinadas a revolucionar los patrones vistos hasta ahora.
Miyamoto, tras ser condecorado en Francia el pasado año
Ante un currículum así no es de extrañar que Miyamoto tenga millones de seguidores en todo el mundo, que esperan ansiosos cada nuevo título en que participa. Pero no sólo sus usuarios le admiran: desde la revista Times se le ha llegado a clasificar como «El Spielberg de los videojuegos», e incluso ha sido nombrado Caballero de la Orden de las Artes y las Letras por el Gobierno Francés. Pero como el propio Miyamoto declaró, a él «no le gusta la atención, prefiere que su trabajo hable por él». Y su trabajo es una obra maestra.Para más información: - Citas célebres de Shigeru Miyamoto - Títulos en los que ha participado (Inglés) - Miyamoto Shrine, página dedicada al genio de Nintendo (Inglés) - Pequeño documental sobre el trabajo de Miyamoto (Inglés)