

Análisis a fondo de Call of Duty: Black Ops 3
Y es que Treyarch ha realizado un magnífico trabajo a la hora de conjugar lo mejor de la serie, pero incorporando importantes novedades, que gustarán tanto a los jugadores más expertos como a aquellos que se incorporen a la saga con este juego. Entre las novedades más destacadas se encuentra el sistema de movimiento encadenado basado en el impulso que nos permitirá desplazarnos con total libertad por los diferentes escenarios, con lo que el juego gana en dinamismo y se aprovecha al máximo la verticalidad de los distintos mapas. Entre otras acciones, tendremos la oportunidad de realizar saltos sobre objetos al mismo tiempo que mantenemos el control absoluto del arma, deslizamientos y saltos con impulso. De primeras, puede que este nuevo sistema de movimiento nos recuerde al que introdujeron los exoesqueletos de Advanced Warfare el pasado año, pero en la práctica encontramos matices y diferencias importantes. Aquella estructura de AW dotaba a los jugadores de una fuerza y habilidades increíbles, de manera que sin problemas podríamos realizar también increíbles saltos, veloces desplazamientos en todas las direcciones, agarrarse a paredes, sobrevolar grandes espacios y contar con un sinfín de habilidades que podíamos aprovechar tanto en la aventura como el multijugador. Aunque en esta ocasión también contamos con nuevas posibilidades de movimiento, los exoesqueletos son sustituidos por unos implantes cibernéticos, que ofrecen nuevas dinámicas, pero aquí mucho mejor implementadas, sin que sean tan determinantes en las partidas. Y es que no son pocos los que se quejaban en la anterior entrega del uso exagerado de los saltos y de unos movimientos demasiado frenéticos, en especial en el multijugador. Las partidas eran frenéticas y muy divertidas, pero también es verdad que se perdía buena parte de la esencia que caracterizaba a la saga. Sin embargo, en Black Ops 3 todas las nuevas habilidades están mejor integradas, y su uso es mucho más lógico, de manera que es la jugabilidad la que se ve beneficiada por su utilización. El ritmo de las partidas ofrece un equilibrio perfecto entre el clásico sistema de la franquicia y las nuevas mecánicas. Estos nuevos elementos son todo un acierto y suponen un gran añadido para una IP que, con el nuevo ciclo de máquinas, ha apostado claramente por la innovación, sin dar la espalda a los millones de fans que esperan cada año una nueva entrega de su juego favorito.















Gráficos de Call of Duty: Black Ops 3
Desde un punto de vista técnica y visual, Treyarch nos ofrece la mejor y más espectacular entrega de toda la saga, con un nivel general que raya a un gran nivel. Todos los modos de juego hacen gala de un apartado gráfico fabuloso, gracias también a los 1080p de PS4, los 900p de Xbox One y hasta 4K en el caso del PC. La nitidez y calidad de todos los elementos que aparen en pantalla es patente desde el primer segundo en cualquiera de las tres plataformas. Ni que decir tiene que los 60 frames -una de las señas de identidad de la serie- permiten una fluidez total en la acción, sin caídas en ningún momento. Pero no nos referimos solo a un mero “lifting” visual, con una mejora en la resolución sin más, sino que se ha realizado un inmenso trabajo para dotar al juego de una apariencia excelente. A ello ayuda un sistema de iluminación completamente nuevo que permite la inclusión de toda clase de efectos, además de dotar a las imágenes de un realismo mucho mayor. También se ha mejorado de forma notable todo lo relativo a texturas y animaciones, hasta el punto que ahora resulta toda una gozada ver a todos los personajes y escenarios. Mención especial para el gran trabajo realizado con las distintas localizaciones de la campaña y los mapas del multijugador, diseñados con las nuevas habilidades en mente, lo que permite una acción mucho más vertical y dinámica. Por último, resaltar también la impresionante calidad de las escenas de introducción entre las misiones.

Sonido de Call of Duty: Black Ops 3
La banda sonora de Call of Duty: Black Ops 3 sigue la línea trazada por las anteriores entregas, con temas épicos e intensos que permanecen en un segundo plano frente a los espectaculares y potentes efectos de sonido. Realmente nos sentiremos dentro de la propia guerra gracias a la cantidad y calidad de todos los sonidos, que ahora suenan mucho más futuristas en el caso de las armas y los movimientos de los soldados. Pero el punto más destacado de este apartado es el soberbio doblaje al castellano.
